La nueva plataforma discográfica lanzada por el sello catalán Hivern Discs se llama HVNX y se estrena con el mini lp de Alejandro Rodríguez aka Kresy bajo su nuevo alias Bep Kororoti.
El joven productor asturiano se inspira en la leyenda de Bep Kororoti, uno de los «portadores de cultura» del cual publicó detalles en 1972 Erich von Däniken en su libro «Gods from outer Space», en el que se refereía a Kororoti como uno de los “visitantes de las estrellas” o “astronautas ancestrales” que se pudieron documentar en los rituales de los indios Kayapó en Brasil, quienes lo representaban envuelto en un traje de paja que se asemeja mucho al de un astronauta de la actualidad.
Su nuevo trabajo de título homónimo inaugura HVNX, el nuevo sub-label de Hivern nacido para dar salida a material incendiario de corte techno y desarrollos analógicos: «more adventurous sounds, with a special accent in techno and hardware jams”.
En este concepto de jam sesión en una toma, con sintetizadores corrosivos, percusión primaria, líneas ácidas punzantes y cantos rituales encaja a la perfección la figura de un Kresy -con diversos bangers en el disco duro y a punto de salir en otros labels- que parece tocado por la barita mágica, pues todo lo que compone y produce lo convierte en oro de muchos kilates.
El mini lp de 7 cortes ha sido lanzado en una tirada exclusiva (como es norma de la casa) y lleva un diseño impreso de los hombres futuristas Amsunzu, obra del diseñador gráfico afincado en Barcelona Arnau Pi quien ha trabajado para otros conocidos proyectos como Hivern Discs, Permament Vacation, Young Turks o Discos Paradiso.
Musicalmente el disco es como una patada en los dientes desde el primer corte de la cara A titulado Canoa, un viaje río arriba en el que fluyen las líneas ácidas entre oscuros graznidos de pájaros y percusión seca, o los sonidos tribales de Crankle, atrapados entre percusión étnica y gritos que parecen emanar de una hoguera humana, mientras que Jhunde se deconstruye sobre estructuras minimalistas cargadas de suciedad con bombos rotos y sintes cáusticos; y Tzantza -o «cabeza reducida» en la tribu indígena de los shuar- deambula entre congas y progresiones largas de percusión limitada a la mínima expresión.
En la otra cara del disco Proronga se mete de lleno en el Amazonas con percusión indígena y diversos elementos selváticos que dan forma a un techno tribal de grandes vuelos, mientras que Pesadillas Del Marabú crece sobre una base más housera acentuando el componente hipnótico y enigmático con riffs tribales, texturas tropicales y una línea de sintes muy aguda; y Subvariation cierra el disco con tonos subterráneos y brumosos de los que subyace un manantial ácido de techno orgánico y mental.
Tracklist:
A1. Canoa
A2. Crackle
A3. Jhunde
A4. Tzantza
B1. Proronga
B2. Pesadillas Del Marabú
B3. Subvariation
Seguro que también te interesa....
