La última referencia del label de culto Warp nos muestra el nuevo lp del célebre productor americano Daniel Lopatin más conocido como Oneohtrix Point Never y titulado Garden Of Delete.
Siempre es un reto sentarse a escuchar y desmenuzar la música de Lopatin, ya no sólo por al dificultad de pronunciar correctamente su nombre sino más bien por la complejidad que encierra toda su obra musical y que de un modo u otro es necesario analizar en su conjunto para descifrar el mensaje que se encierra detrás de cada nuevo trabajo del de Massachusetts.
Para hacerlo y no morir en el intento habría que hacer un ejercicio de regreso al pasado (navegando primero por el futuro más alienígena que se nos ocurra) y acercarnos a la adolescencia de un Lopatin cargado hasta las trancas de death metal, rock alternativo o grunge, conceptos nunca olvidados por él pero enmascarados en sus anteriores trabajos entre filtros de ciencia ficción («Returnal, 2010»), entre drones cálidos y melodías hipnóticas («Replica, 2011») o entre sampleos de electrónica progresiva y escurridizo IDM («R Plus Seven, 2013″).
Tras años de investigaciones sonoras y un entramado digital asombroso Lopatin entrega su trabajo cumbre hasta el momento con este nuevo lp titulado Garden Of Delete, en el cual se guardan una gran sucesión de estructuras más cercanas al concepto de pop (pop en Warp, con todo lo que ello puede significar), donde tienen cabida glitches en clave hip-hop, secuencias metálicas, guitarreo macarra, vocoders filtrados e incluso algún que otro flirteo con la PC Music.
No hay dudas que un trabajo de esta magnitud conlleva mucha complejidad y simpre es difícil llegar a convencer al gran público pero Lopatín lo ha consegudio, orientando entre sus característicos patrones marcianos, pasajes emotivos y voces procesadas, por lo que sería injusto a estas alturas de la película no hablar de Oneohtrix Point Never como uno de los genios de la electrónica de este siglo.
La promoción de Garden Of Delete también ha estado a la altura de los genios, con la invención de la banda de los 90 Kaoss Edge o del término «hypergrunge» con el que definía el estilo de este disco, los post colgados en su web a mediados de verano con mensajes crípticos o la extraña entrevista con un ente alienígena llamado Ezra.
El disco comienza con la inquietante psicofonía de Intro, junto a los ruidos y ritmos acelerados de Ezra con los que ya intuimos esa novedad estilística que subyace en Garden Of Delete y que continúa con los ecos en forma de interludio de ECCOJAMC1 y desemboca en uno de los mejores momentos del disco con Sticky Drama en clave PC Music: filtros de 8-bits, vocales r&b pitufadas, black metal y ambientaciones de drum´n´bass demoníaco.
Nuevo interludio con SDFK y otra vez a derrochar ritmos acelerados y extasiados en Mutant Standard, con sintetizadores abrasivos, vocales filtradas y martilleo raver, que por momentos encuentran reposo en exploraciones ambientales pero que vuelven una y otra vez a machacar nuestras mentes, mientras que Child of Rage permite oxigenar unos instantes con pads espaciados y atmósferas chill, y Animals hace lo propio con sintes elásticos y líneas vocales atonales.
I Bite Through It (que sirvió como adelanto del disco) recupera la atmósfera perturbadora por medio de sonidos abruptos y experimentación psicodélica, y Freaky Eyes muta desde órganos sinuosos hacia palpitaciones vocales en clave soul y termina por sonar a algo cercano a la PC Music igual que hace Lift, o al r´n´b industrial e hipnótico de No Good con la que se cierra el disco.
Estamos ante una obra maestra sin lugar a dudas, pero también ante un disco abrumador y ante el cual es necesario posicionarse con la mente abierta de par en par, pero que al final deja ese poso de grandeza que sólo los genios saben conjugar.
Tracklist:
01. Intro
02. Ezra
03. ECCOJAMC1
04. Sticky Drama
05. SDFK
06. Mutant Standard
07. Child of Rage
08. Animals
09. I Bite Through It
10. Freaky Eyes
11. Lift
12. No Good
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