La sobrassada es un embutido crudo curado, elaborado a partir de carnes seleccionadas del cerdo, condimentadas con sal, pimentón y pimienta negra. Se embute en tripa y presenta una lenta maduración.
Un producto tradicional de las Islas Baleares que en la cocina mallorquina tradicional se consume de diversas maneras: tostada en invierno, o untada en pan y cruda en verano. Es habitual de muchas recetas de la cocina mallorquina, como el «arròs brut» o cocinada y mezclada con miel. Aunque puede durar varios años en un lugar seco, lo habitual es consumir la longaniza durante el primer invierno, la sobrasada en verano, y las más grandes cuando se hace la matanza del año siguiente.
En esta ocasión nos acercamos a Mallorca Delicatessen Mateu Pons para descubrir dos tipos de Gran Sobrassada elaboradas tanto con cerdo blanco como con cerdo negro. Son la creación de una empresa familiar que tiene como objetivo ofrecer al mundo un pedazo de la cultura mallorquina a través de la gastronomía. Trabajan todos sus productos estrechamente con artesanos y cooperativas agrícolas que fomentan la vida y el trabajo del campo. La idea final es unir a campesinos y fabricantes por un mismo concepto: preservar las tradiciones y garantizar unos productos de alta calidad.
Este patrimonio y herencia cultural se reúnen en una selección de los productos más representativos de la isla, como es el caso de la Sobrassada. Mateu Pons tiene claro que el tiempo, la cultura, el cuidado y la constancia son los ingredientes principales para lograr una colección de sobrassadas de refinada calidad. Todas ellas se elaboran respetando el proceso que secularmente se ha conservado en las casas mallorquinas empleando especias y carnes de primera calidad, una selección manual y el respeto por los tiempos de curación garantizan un producto excepcional.
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