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Pan de Muerto recién horneado

Uno de los platos típicos del Día de Muertos

2 noviembre, 2013 / abzabaleta

Hoy 2 de noviembre es un día muy especial en México, uno de los días grandes del país americano donde se celebra el Día de los Muertos. Un día donde se muestra el respeto a la muerte y la devoción a los que ya no se encuentran con nosotros.

El Día de los Muertos destaca por las ofrendas que se realizan a esos seres queridos que ya no se encuentran con nosotros, entre esas ofrendas por supuesto no faltan los platos que más gustaban en vida. Entre toda esta ofrenda hay algunos platos muy típicos de la cultura mexicana que siempre nos han causado admiración en la redacción de Hunger Culture como son el Pan de Muerto o la Calabaza en Tacha, en #HC nos vamos a centrar en el primero.

El Pan de Muerto es un pan, redondo y adornado con «huesos» de la misma masa. La masa es ligeramente dulce y la puedes espolvorear con semillas de ajonjoí de Puebla o convertirlo en un pan más dulce con una cubierta de mantequilla y azúcar.

Ingredientes:

  • 250 grs. de harina
  • 30 grs. de azúcar
  • 5 grs. de sal
  • 1 pieza de huevo
  • 7 grs. de levadura seca
  • 100 mls de agua tibia
  • 50 grs. de mantequilla suavizada
  • 30 grs. de leche en polvo
  • 1/2 cucharadita de esencia de azahar
  • 1 cucharada sopera de semillas de anís
  • c/n de semillas de ajonjolí de Puebla (sésamo) para decorar

Elaboración:

Mezclar la harina y la levadura y reservar. Colocar en el tazón de la batidora mantequilla, azúcar, sal, huevo y leche en polvo y mezclar a integrar muy bien. Comenzar a agregar la mezcla de harina con la levadura e ir agregando poco a poco el agua tibia, hasta obtener una masa lisa y elástica.Ya que nuestra masa está con muy buena consistencia al final agregamos la esencia de azahar y las semillas de anís y amasar bien a que se integren, colocar en un traste engrasado con un poco de aceite y cubrir con un trapo de cocina o un plástico y dejar reposar a que doble volumen.

Pasado el tiempo de reposo formamos los panes y decoramos formando los huesos que cubran el pan. Dejar fermentar nuevamente y barnizar con huevo, espolvorear con las semillas de ajonjolí de Puebla o sésamo y hornear a 180 grados centígrados por espacio de 15 o 20 minutos dependiente del tamaño de sus panes yo los hice de 80 grs. aprox. y estuvieron listos en 18 minutos aprox.

Finalmente, coloque los panecillos en el horno precalentado a fuego medio durante 40 o 50 minutos. Disfruta tu pan de muerto con chocolate caliente, atole o con café de olla. Se come rebanado, solo o untado con mantequilla. (Vía – La Cocina de Norma).

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