Etapa 11 (La Vuelta Gastronómica)

Gastronomía andorrana de montaña y vinos de altura

2 septiembre, 2015 / abzabaleta

Tras el día de descanso donde nos dimos un paseo por Andorra y nos jalamos un menú colombiano-holandés llega la etapa reina de esta edición de La Vuelta que transcurre integramente por el Principado. Una etapa que sale de Andorra la Vella y llega a Cortals d´Encamp tras coronar cuatro puertos de primera y uno espcial que puede marcar el devenir de La Vuelta 2015.

En esta Vuelta Gastronómica descubrimos la cocina autóctona de Andorra, una gastronomía de montaña con influencia de la gastronomía francesa, especialmente la provenzal y algo de española, en concreto catalana. Con el aumento del turismo se han incorporado los más variados elementos de la cocina internacional presentando una amplia oferta con menús clásicos y económicos para quien no desee complicarse mucho la vida, o platos originales y finos acompañados de un buen vino para los que no miren tanto el precio.

Como gastronomía de Andorra destacamos entre los entrantes: la escudella, que no es otra cosa que un potaje de legumbres aderezado con el sabor del Principado, lentejas y arroz cocinados y combinados de diversas maneras, los caracoles a la llauna y quesos andorranos tan buenos como los mejores. Para los segundos platos abundan piezas de caza como ciervo, sarrio, perdiz, ardilla, jabalí o conejo, así como platos con el cerdo como protagonista como las costelles a la losa o las rostes al mel. Además, gracias a la riqueza de sus ríos destacan sus truchas, que se prepara al horno, asada, en caldos, combinada con verduras y especias, bañada con champán o vino, con salsas al estilo francés o simplemente frita. Por último en los postres destacan el mousse, de diversos sabores, crepes dulces, torrijas, coca masegada, orejones y manzanas asadas.

Pero esta Vuelta Gastronómica por Andorra no podía terminar sin probar los curiosos vinos de altura que se dan en el principado, elaboraciones que son todo un descubrimiento donde encontramos una variedad infinita con viñas de albariño, viognier, pinot gris, pinot noir o la curiosa Cornalín de origen suizo que da como resultado entre otros con el tinto Borda Sabaté Torb (nombre del viento con nieve de las cimas de alta montaña) un vino de gran personalidad y potencia aromática realizado con un ensamblaje de Cornalin, Syrah y Merlot.