Vermú Dance w/ Chelis

Si eres de los que gusta de la electrónica no convencional, olfateas en toda referencia que se salga de los parámetros establecidos por las radiofórmulas, si aborreciste el fenómeno del minimal techno y, en definitiva, eres un culo inquieto musical, Chelis podría ser tu padre.

Así definen a este DJ con base en Zaragoza en su página de Facebook. Pero lo cierto es que no se aleja nada de la realidad. Chelis es sin lugar a dudas una de las referencias musicales ineludibles de este país tras pasar por festis tan diferentes como Jazzaldia, Sónar, Low Festival o mezclar música al lado de Princess Nokia. Pero lo que seguro que no sabes es que su otra gran pasión es la gastronomía, por eso se ha acercado a León para armonizar sus variantes musicales con vermús, vinos, boquerones o lo que haga falta. Pero sobre todo para hacerte pasar una tarde inolvidable junto al buen rollo que se genera cada sábado en los Vermú Dance del Delicatessen.

Por suerte, el eclecticismo es un valor cada vez más fácil de encontrar entre los djs. Otra cosa es encontrar un dj que sea capaz de sorprender. Uno que vaya más allá de utilizar varios estilos dentro de la misma familia. Uno que combine los más dispares géneros y nunca sepas hacia dónde se dirigirá en la siguiente mezcla.
Si esto criba considerablemente el total, la cifra se reduce aún más si buscamos un dj que no solo se limite a utilizar muchos géneros para un set sino que, dadas las circunstancias, pueda realizar una sesión completa sobre cada uno de ellos.

Chelis es capaz de todo lo anterior y además de ejecutarlo con un conocimiento profundo de cada estilo, un discurso coherente, una técnica impecable, personalidad, riesgo, sentido del humor y emoción.

En sus dos décadas de trayectoria ha tenido residencias dedicadas al grime/dubstep, al techno, a la música negra en todas sus vertientes, al skweee (mejor buscadlo en google), al ambient (sus célebres sesiones Ambipur junto a VJ Héctor De La Puente), al hip hop, a la Bass music, Disco…

Estas virtudes no han pasado desapercibidas para promotores de clubs como Moog, Katos, Florida 135, Razzmatazz, Siroco, Lolita, Nitsa o Nasti (entre otros muchos), o festivales como Sónar (en el cual ha participado en cinco ocasiones cerrando en una de ellas), Monegros Desert Festival (cuatro ediciones), Observatori, Electro2m, Periferias, BAM, Lurrazpiko, Primavera Sound… A nivel internacional ha visitado con su maleta clubs y festivales en Copenhague, Oslo, Paris, Estocolmo, Helsinki, Rotterdam, Oporto o Berlín.

Respetado por la prensa especializada (ya acumula tres galardones al mejor dj en los Premios de la Música Aragonesa y cuatro veces elegido mejor dj nacional para la revista Rockdelux), aquel que le haya visto pinchar, le admira, y aquel que se haya ido de cañas alguna vez con él, seguro le quiere.

Aun con un currículum como este la labor de Chelis no se acaba detrás de los platos. Entre sus muchos proyectos fue fundador de ROBOT, tienda de discos referencia en su ciudad. En el plano editorial ha repartido sus esfuerzos entre el sello KONTAKTE –que cofundó junto a José Antonio Serrano y David Ortolá y que se decanta por las texturas IDM, la electrónica más abstracta y compleja– y el sello Lo Fi Funk, que transcurre por el territorio del Funk sintético de baja fidelidad, los beats retorcidos y el Skweee en nuestro país y que dirige junto a su amigo y compañero Hybakusha.

Actualmente es el alma mater de Magma, un evento bimensual acompañado de un festival anual dedicado a la electrónica underground que mira al futuro y revisa el pasado.