3 agosto, 2014 / Akeno Inokuma
Se acerca el momento de desconectar unas semanas en la redacción de #HC y Huelva aparece como un paraíso de espacios naturales donde juntar el mar, la arena y la sal con lugares tan sorprendentes como las Marismas del río Piedras y Flecha de El Rompido o la Sierra de Aracena y Picos de Aroche. Pero quizá uno de los lugares más mágicos de nuestro país es Doñana.
Un espacio natural protegido que abarca miles de hectáreas y comprende el Parque Nacional de Doñana y el Parque Natural de Doñana. Declarado Reserva de la Biosfera en 1980 y Patrimonio de la Humanidad en 1994. Un territorio formado por diferentes ecosistemas, entre los que destaca la zona de marisma.
En Doñana parecen más de 900 especies de flora, 360 de aves, 37 de mamíferos no marinos, 20 de peces de agua dulce, 13 de reptiles y 10 de anfibios. Cabe destacar la presencia del lince ibérico, ya que sólo en Doñana y Sierra Morena Oriental quedan ejemplares de esta especie de manera estable. Menos conocidos pero también muy interesantes aparecen, por un lado el caballo marismeño y por otro el caballo de las retuertas, considerado este último la raza de caballo salvaje más antigua de Europa.
Un lujazo al alcance de todo el mundo que se puede combinar además de con las kilométricas playas de la provincia, con degustaciones de jamón de Huelva y la visita al Museo del Jamón y del Cerdo Ibérico ubicado en Aracena. Degustaciones gastronómicas que no pueden faltar en vuestros viajes de este verano.
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